La Comunidad de Madrid invirtió el pasado año 52 millones de euros en ayudas destinadas a la instalación de ascensores en edificios residenciales que carecieran de estos elevadores eléctricos.
Estas subvenciones fueron destinadas a facilitar la colocación de 389 elevadores, beneficiando a casi 12.000 propietarios.
Dichas prestaciones, tramitadas a través de la Consejería de Vivienda, Transportes e Insfraestructuras, «cubren el 80% del coste de la obra», concediendo un máximo de 90.000 euros a inmuebles con altura igual o superior a tres plantas sobre rasante, con un 50% de su superficie construida en uso residencial, que estuvieran «bien conservados».
Dentro de esta actuación, enmarcada en el Plan Regional de Ascensores, también se incluye la colocación de salva escaleras, rampas u otros elementos que actúen como «complemento al montaje de los elevadores» para el que se solicita esta ayuda.
Asimismo, el Ejecutivo autonómico ha indicado que mantiene abierta otra convocatoria de subvenciones para la mejora de la accesibilidad en edificios de estas mismas características y viviendas, cuyo plazo finaliza el próximo 26 de abril. Estas incluyen la instalación de infraestructuras como grúas o aparatos análogos «que permitan el acceso a ciudadanos con movilidad reducida a zonas comunes como jardines, áreas deportivas, piscinas u otros similares».