El Área Delegada de Vivienda ha abierto una consulta ciudadana para conocer la opinión de los madrileños sobre la habitabilidad de sus casas, edificios y barrios. Sus respuestas se tendrán en cuenta para la elaboración de la nueva Ordenanza de Habitabilidad del Ayuntamiento de Madrid, cuyo objetivo es mejorar las condiciones de las viviendas de la capital en términos tanto de salud e higiene como socioeconómicos.
Esta encuesta es el resultado de la primera fase de los grupos de trabajo que el concejal delegado de Vivienda, Álvaro González, puso en marcha en septiembre de 2022 con el fin de redactar dicha ordenanza.
La consulta pública permitirá conocer las necesidades actuales de la población madrileña y, así, dar respuesta a las nuevas condiciones en materia de vivienda. La ciudadanía podrá opinar sobre aquellos aspectos, tales como la temperatura, el aislamiento, los espacios comunitarios o la accesibilidad, que para ellos proporcionan más confort y satisfacción a una casa, un edificio y un barrio, y puntuar su hogar según estos criterios.
Para participar, los ciudadanos deberán registrarse en la plataforma municipal Decide Madrid y responder al cuestionario ubicado en el espacio de debate. La encuesta estará disponible durante 30 días. La participación ciudadana proporcionará información real de la situación de la vivienda en la ciudad de Madrid “logrando, de esta manera, que las ayudas y esfuerzos lleguen donde más falta hacen y más efectivos resulten”, explica González.
Con los resultados de esta consulta pública, en las próximas semanas empezarán a trabajar diversos grupos de trabajo formados por expertos en vivienda y habitabilidad. En una primera fase se pusieron en marcha las mesas de trabajo de técnicos municipales de distintas áreas de Gobierno (Obras y Equipamientos, Medio Ambiente y Movilidad, Familias, Igualdad y Bienestar Social …). Los grupos de trabajo tienen como objetivo redactar un nuevo texto que regule las características físicas de los inmuebles de la capital, dirigido a mejorar ciertos aspectos como las condiciones higiénicas; la estructura de terrazas, balcones y azoteas; el bienestar térmico de los edificios, su iluminación y aislamiento acústico o el diseño de los espacios comunes.
Otro de los fines de estos grupos de trabajo es unificar, clarificar y adaptar la ordenanza al caso de Madrid para tener una visión global de la situación, dada la abundante y dispersa normativa sobre vivienda existente.
La nueva ordenanza también busca incentivar la mejora de los parámetros de habitabilidad en las viviendas, a través de su vinculación a los planes de ayudas municipales a la rehabilitación que el Área Delegada de Vivienda pone en marcha anualmente.
En la web transforma.madrid.es se recogen las líneas de ayudas actuales, planes y programas para mejorar las viviendas, los edificios y los barrios.